viernes, 21 de abril de 2017

ARTÍCULO

SITIO PARA EL RESCATE HISTÓRICO-CULTURAL DE BOGOTÁ

El centro de la capital colombiana es cuna de la historia de nuestro país desde 1492, cuando se descubrió América y se empezó a configurar a lo largo del territorio una conquista magna de aprovechamiento de recursos, saqueos, imposición cultural e ideológica por parte de la colonia española hacia los pueblos primitivos de América latina y más específicamente a lo que en ese entonces se conocía como La gran Colombia que ocupaba la actual Colombia, Ecuador y Venezuela. Sin embargo y pese a la historia existen lugares hoy olvidados que atestiguaron unas formas de protesta social que nos liberaron del sometimiento de la época y de la que hace parte La casona del museo ubicada en la calle 16 5-24 más específicamente al frente del Museo del Oro.

El desarrollo histórico de Colombia se ha enunciado a través de libros, periódicos y constituciones cuando son precisamente los lugares quienes recrean el pasado de nuestro país, en este caso es importante reconocer una lucha por la independencia que aún hoy en día no ha desaparecido pero presenta otros factores sociales. Desde la Casona del museo se da una mirada hacia las raíces de nuestro pueblo ya que a pesar de su largo tiempo de existencia -una característica que comparten la mayoría de lugares del centro- prolifera la pluralidad de la cultura indígena que sentimos se ha echado un poco de lado por la sistematización de identidades ajenas a las nuestras. Esta Casona fue construida hacia el 1730 por una familia noble y religiosa quienes por su misma concepción monoteísta la entregaron a la iglesia, después ésta fue adquirida por una familia española.

Actualmente su infraestructura se encuentra en buen estado y consideramos que son precisamente las paredes quienes consolidan relatos de memoria de un periodo histórico que significó toda una ruptura. Estos relatos son comprendidos mediante la percepción ya que desde esta postura se dan las primeras concepciones cambiadas y que tienen una validez relevante dentro de la geografía Colombiana. Y para terminar la importancia de este lugar radica en que reconoce unas formas de mercantilización que, aparte de aportar a la subsistencia de algunas familias mediante la venta de artesanías, esmeraldas, recuerdos de él museo del oro y un delicioso café, obedece a un orden de reproducción del patrimonio cultural de la historia de nuestro país

No hay comentarios:

Publicar un comentario